algunos detalles clave sobre este tipo de cable:

Interfaz: Convierte una conexión USB 3.0 en una salida HDMI, permitiendo que un ordenador sin puerto HDMI pueda conectarse a una pantalla externa como un monitor, proyector o televisor.

Resolución: Generalmente soporta resoluciones de hasta 1080p (Full HD), y algunos modelos incluso permiten 4K, dependiendo del modelo.

Plug & Play: Suele ser compatible con la función plug & play, lo que permite una instalación sencilla sin necesidad de controladores adicionales (aunque algunos modelos podrían requerir software específico).

Compatibilidad: Funciona en dispositivos con Windows y, en algunos casos, MacOS. Ideal para laptops, PCs y otros dispositivos que carecen de un puerto HDMI.

Alimentación: Al ser USB 3.0, ofrece una transferencia de datos más rápida y estable que las versiones anteriores, además de no requerir alimentación externa.